sábado, 22 de abril de 2017

Guía de La Divina Comedia de Dante Alighieri


                                                   Biografía de Dante Alighieri:
 Dante Alighieri nació en  Florencia en 1265. Estudió en la escuela del Convento de Santa Crose y María Novella (1275-1282). Allí leyó textos bíblicos y los clásicos grecorromanos. Tuvo como tutor a Brunetto Latini quien le enseñó oratoria. En ese tiempo se hizo amigo del poeta del Guido Cavalcanti y del pintor Giotto.

En 1274 conoció a “Beatriz” de Portinari, hermosa niña de 9 años de edad. Él se enamoró de ella y la describió como un ángel, posteriormente, en sus obras.

            Dante, en su juventud, es comprometido con Gemma Donatti por su padre. Sin embargo siguió enamorado de Beatriz. En 1283, ve por segunda vez a Beatriz y, a partir de ese entonces, comenzó a escribir de ella en sus poemas. En 1289, Beatriz se casó con Simeone de Bardi (por compromiso familiar) y al año siguiente Beatriz murió. Dante quedó desolado ante ese funesto evento.
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En lo político, Dante formó parte del partido de los Güelfos (seguidores del Papa), quienes se  oponían al partido Gibelino (partidarios de los emperadores de Alemania). El poeta contaba con más de 30 años de edad, cuando llega priorato de la República. Logra, así, la cumbre de su vida política.

Cuando su partido se divide en Negros (extremistas) y Blancos (moderados), se vio obligado a abandonar Florencia, condenado al destierro perpetuo, por las calumnias de los negros. Lo acusaron de traición. El desencanto por la corrupción de la ciudad y su rectitud moral le apartaron de la política. Se marchó de Florencia para siempre. Así pues, vivió vagabundo y decepcionado por los pueblos italianos. En este periodo, recibió ayuda de su amigo más fiel Bartolomeo y escribió La Divina Comedia.

En 1316, Dante rechazó un retorno a Florencia, no quería verse envuelto en la política corrupta. En 1320, se trasladó a Ravena como diplomático. Al año siguiente, el 14 de setiembre, víctima de la malaria, murió el poeta representante de la cultura cristiana de la Edad Media.

Dante escribió: La Divina Comedia, Convivio, Églogas, Epístolas, De la Monarquía, Poesía, Vida Nueva y De la lengua vulgar.


                                                    La Divina Comedia
  
.     La Divina Comedia es una obra que muestra la eternidad dividida en tres espacios: infierno, purgatorio y cielo. El texto construye el imaginario occidental sobre estos mundos. La propuesta del autor es una reflexión sobre la vida  y los vicios (antivalores) que agobian al hombre. Se presenta la lucha del hombre y los problemas.

     Argumento
              
Para Dante, la Tierra, una creencia medieval, está inmóvil en el centro del mundo. A su alrededor giran las esferas celestes y con ellas el sol, los planetas y las estrellas. El infierno y el purgatorio están en la tierra, el uno en forma de abismo hasta el mismo centro de la tierra y el purgatorio,  en forma de montaña altísima, en cuya cúspide está el paraíso terrenal.
Imaginariamente, Dante inicia su viaje de 7 días en la segunda noche de la primavera, abril de 1300, cuando tenía 35 años.


El Infierno

Muerta Beatriz, el amor de su vida, a la mitad del camino de su vida, Dante se encuentra perdido en una selva oscura, sin saber cómo llegó allí. Al tratar de salir, se le acerca una pantera (la lujuria), también un león (la soberbia) y una loba (la avaricia). Él asustado  intenta descender al hondo  de un valle y  no encuentra la salida. Cuando está aterrado, de improviso, se le aparece Virgilio, con  una misión delegada por Beatriz, quien ha conseguido llevarlo al Cielo para que esté a su lado.
Virgilio debe mostrar a Dante el mundo de la eternidad. Así, los dos personajes comienzan su travesía por un camino subterráneo, único por el que se puede salir de la selva de la perdición de la vida, evitando la muerte. Dicho camino conduce a Dante y a Virgilio hasta el vestíbulo del infierno.
 El infierno es como un embudo monstruoso dividido en círculos que van estrechándose hasta llegar al mismo centro de la tierra, donde habita Lucifer. El infierno es, pues, un cono invertido, excavado en la propia tierra.

             Pasada la puerta, donde está  un terrible letrero que dice “Dejad aquí toda esperanza los que entráis”, se aproximaron al río Aqueronte. Allí, Carón, el barquero infernal, transporta a los condenados al lugar del suplicio en la otra ribera. Comienza los círculos de castigos.

El primer círculo es el Limbo. En él no hay tormentos, sino suspiros. No hay más que tinieblas, donde habitan las almas de los que murieron sin bautizar o de los hombres justos que, por haber vivido antes de Jesucristo, no conocieron la verdadera religión. Allí se encuentran Homero, Platón y Sócrates, quienes dialogan entre sí.

         En el segundo círculo, están los lujuriosos. Un torbellino los arrastra continuamente y los arroja contra las vallas, pues los lujuriosos están condenados por sus pasiones. Se encuentra Cleopatra, Helena de Troya, Paris, Aquiles y Dido. 

        En el tercer círculo, encontraron a los que se dejaron arrastrar por la gula. Los golosos están sumergidos en el fango y soportan una lluvia de granizo. Ellos siempre querían más. Por eso, la lluvia no cesa. Los castigados son resguardados por el can Cerbero, quien ladrando continuamente con sus tres fauces los irrita, los desgarra y los despedaza. Cerbero tiene hambre eternamente. Allí encuentran a Ciacco, un conocido de Florencia con el que habla de las discordias que lo llevaron al destierro. 

       En el cuarto círculo, los avaros y los pródigos chocan entre sí, arrojándose con enorme peso unos contra otros y todos se gritan ¿Por qué guardaste? ¿Por qué derrochaste?  Entre todas las almas atormentadas, encuentran unas con cabezas rapadas. Ellos son clérigos, papas y cardenales a quienes subyugó la avaricia (incluir a sus enemigos de la Iglesia en el infierno, le trajo como consecuencia el disgusto de muchos). Virgilio le habla sobre la fortuna en la vida.

       En el quinto círculo, los iracundos están en la laguna Estigia, que es fangosa, fétida y rodea la ciudad del dolor. Esa laguna les causará su ira eternamente, vivirán molestos por siempre. El barquero Flegias los lleva en su barca rumbo a la ciudad infernal de Dite.

         En el Dite, cuidad infernal, se aparecen las Furias  rodeadas de las Hidras. Las Furias se desgarraban el pecho con las uñas, se golpeaban con las manos y daban fuertes gritos. Cuando un ángel ve a Dante y Virgilio, les abre las puertas del Infierno más profundo.

        En el sexto círculo, los personajes ven gran cantidad de sepulcros envueltos en un mar de llamas de cuyo interior salen lamentos. Esas almas encerradas en los sepulcros eran los líderes de las herejías que atentaban contra la Iglesia (se llaman heresiarcas). Encuentran a sus amigos, Guido Cavalcanti y a Farinata (quien predice al poeta su destierro y su pobreza cuando salga de Florencia).

        En el séptimo círculo, los violentos son custodiados por el Minotauro. Hay castigos diversos  para los que han cometido violencia contra la vida (suicidio) y contra los bienes del prójimo (algunos son sumergidos en un río de sangre y otros son azotados por los centauros). Los que han cometido violencia contra sí mismos (se suicidaron) están en una selva espinosa. Algunos  se convirtieron en árboles y en sus ramas habitaban las harpías, pues como no les importa su vida los monstruos inmundos comen y defecan sobre ellos.
        Los pecadores contra Dios, contra la naturaleza y contra el arte estaban en una llanura de seca y ardiente arena sobre la que cae una intensa lluvia de fuego. Son condenados a vivir en un espacio sin naturaleza, sin belleza y sin piedad.

         Luego del séptimo círculo se entra en la  residencia personal de Satanás. Es el lugar más aterrador de la eternidad.

       En el octavo círculo, están los fraudulentos, hombres que habían apartado a las mujeres de su deber (adúlteros), aduladores, magos y adivinos, malversadores del tesoro público (corruptos), hipócritas, ladrones y malos consejeros. Los aduladores se encuentra en la basura; los magos y adivinos están con la cabeza volteada, pues pretenden “ver más allá de lo normal”; los corruptos se sumergen en aceite hirviendo; los hipócritas arrastran pesados mantos de plomo, pues ese es el peso de las mentiras cuando se acumulan; los ladrones son seguidos de serpientes venenosas que representan el peligro de sus acciones; los malos consejeros están en fuego eterno, debido a que sus consejos causaron siempre problemas, y los mentirosos sufren horribles enfermedades, esas que alguna vez utilizaron de excusas.

     En el noveno círculo, están los traidores. Por haber traicionado la confianza sufren un frío espantoso, están en el agua helada. Ese frío representa la desolación que sintieron los que fueron traicionados. En el fondo del círculo, se encuentra Lucifer con 3 rostros que expresan la impotencia, el odio y la ignorancia. De sus ojos salen lágrimas eternamente y sus bocas destrozan a los peores pecadores: Judas Iscariote (quien traicionó a Jesús), Bruto y Cassio (estos dos últimos son los asesinos de César, lo traicionaron, siendo sus amigos). Se termina el infierno, la traición es el peor pecado para Dante.



El Purgatorio

Dante sale del infierno a la media noche siguiente y llega al Purgatorio  que es un cono trunco, un monte con anchas y escalonadas mesetas. Allí,  las almas se preparan para la asunción al cielo.

En la primera meseta, están los soberbios inclinados bajo pesadas piedras, deben aprender a superar su soberbia (las piedras).

En la segunda meseta, se encuentran los envidiosos que tienen los párpados cosidos con alambre para que aprendan a ver su interior, el alambre representa el dolor de no poder compararse con otros para envidiar, pues les impide abrir los ojos.

            En la tercera meseta, se encuentran los iracundos, que lograron controlarse en vida, pero sufre todavía de ira. Deben superar la  niebla densa (la rabia) para poder subir al cielo.

            En la cuarta meseta, están los perezosos e indiferentes. Deben correr hasta superar su pereza.

             En la quinta meseta, hallamos a los avaros, tiene sus caras pegadas  al suelo, llorando y suspirando. Deben aprender a ver más allá de sí mismo.

              En la sexta meseta, están golosos que intentaron controlarse en vida, ellos sufren hambre y sed, mientras perciben aroma de frutas. Deben aprender a comer lo necesario.

             En la séptima meseta, encuentran los lujuriosos que intentaron controlarse, pero no lo han logrado. Ellos deben alcanzar la castidad.

  En la cumbre  del purgatorio,  Virgilio deja a Dante quien camina hacia la selva del Paraíso Terrenal. Allí, se le aparece una hermosísima doncella, luego una procesión con un carro triunfal. Es Beatriz que desciende del cielo.

              Beatriz regaña a Dante y se lamenta de la vida del poeta. Dante confiesa sus culpas y se desvanecen todos sus pecados. Dante se sumerge en las aguas celestiales del Leteo y olvida su vida pasada. Purificado puede subir a las estrellas.


El Paraíso

          Dante asciende al Paraíso verdadero, atravesando con Beatriz, los nueve cielos y esferas, sobre las cuales está el cielo empíreo, fijo, sede del mismo Dios. Allí, donde está Dios, están las jerarquías celestiales (ángeles) y la rosa de los bienaventurados (los santos), iluminada directamente por el propio Señor de la creación.
         Los cielos móviles giran en torno el uno del otro, y forman en conjunto la esfera celeste, que gira a su vez en torno de la terrestre. Cada uno de los cielos se mueve con tanta mayor velocidad cuanto más lejos está de la Tierra. Todos los bienaventurados están en el cielo empíreo y se presentan al poeta, guiado por Beatriz.

Los nueve cielos son:
    El primer cielo es de la Luna.  Es el cielo de acción de gracias a Dios. Beatriz explica al poeta la causa de las manchas de la Luna.

  El segundo cielo es de Mercurio. Las almas se dirigen a Dante para mostrar las glorias divinas. Allí encontramos a Justiniano, gran emperador y jurista romano.

   El tercer cielo es de Venus.  Están las almas que aman al prójimo. Se encuentra Carlos Martel.

   El cuarto cielo es del Sol. Son los que lograron entender y divulgar la vida religiosa. Se encuentra Santo Tomás de Aquino, gran pensador medieval.

  El quinto cielo es de Marte. Se encuentran las almas de lo que han combatido por la fe y han llevado el evangelio a todos, resplandece una cruz.

  El sexto cielo es de Júpiter. Se hallan las almas de los que han administrado justicia rectamente.

El séptimo cielo es de Saturno. Están las almas contemplativas, los que meditaron y rezaron toda su vida, ellos forman una escalera (la Scala divina).

  El octavo cielo es el cielo estrellado. Desciende Jesucristo y la Virgen María, rodeados de  los santos. El arcángel Gabriel desciende en forma de llama y corona a María, quien después sube al Cielo. San Pedro interroga a Dante sobre su fe. Luego, San Juan Evangelista examina a Dante acerca de la Caridad.

  La novena esfera es llamada el Primer móvil. Dante ve la Esencia Divina. Ve un punto resplandeciente de viva luz en torno al cual giran nueve círculos que corresponden a las nueve esferas del mundo sensible. Contempla la grandeza de la ciudad de Dios. Aquí, San Bernardo le invita a estudiar por partes la rosa celestial (la ciudad divina), se encuentran los santos del Antiguo y Nuevo Testamento. Le muestran la gloria de la Virgen María. Llegan a la luz absoluta que es la claridad de la vida.


     El poema concluye con esa visión de la grandeza y sencillez de Dios. Dante ha logrado entender la vida.

     Si La Divina Comedia se analiza adecuadamente, se puede comprender su grandeza, pues la obra creó un imaginario que ha llegado hasta nuestros días. Su aporte más profundo es la propuesta filosófica y teológica que hace el autor, quien reflexiona sobre los vicios de la vida y sobre la esencia de la misma. La Divina Comedia se ha considerado la épica de la vida.

                                                                       Prof. Anabella Rodríguez
PREGUNTAS:

Para responder en su cuaderno:

1.- Analice cómo los castigos se relacionan con los pecados en el Infierno ¿Por qué el autor habrá imaginado que esos pecados se condenaban así?

2.- Analice cómo los castigos se relacionan con los pecados en el Purgatorio.

3.- Analice cuáles son las virtudes que se muestran en el Cielo.

4.- Reflexione qué enseñanza pretende dejarnos esta obra. 


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